domingo, 22 de abril de 2012

Ser

Si de fondos hablamos, yo no se si he tocado alguno. Recuerdo algunos días donde todo parecía gris pero era más bien rosado oscuro, donde el sol brillaba pero no sé si calentaba mucho, días de enteros abismos en mi habitación considerando si escuchar o ver, si estar o desaparecer.
Creo que alguna vez me tocó sumergirme en más de un pensamiento, confiar en habilidades dadas por perdidas y retomar viejos hábitos, cantar en la ducha para salir de lo absurdo y caer en lo cotidiano, dejar de pensar tanto para volver a la realidad.
Minutos en los que te das cuentas que para ser hay que pensar, pero no demasiado, ya que en demasía comienzas a perder el norte de tus pensamientos y con ello el norte de tu ser.

Considerando mis aficiones a perderme en lo extravagante, he llegado a conclusiones tales que lo perdido se da por ganado cuando todo esta perdido, y lo ganado no son más que experiencias a tu favor. Que lo crecido en corazón no necesariamente es perdido de pensamiento, pues compatibilidades, créanme, existen. Y de estar tan perdido en este mundo, amigos míos, nadie esta tan perdido como cree, pues la tendencia a exagerar los sentidos es un abuso que todos cometemos.
Ya en tranquilidad pese a estar siempre cuesta arriba, ser es algo magnifico, glorificante para el espíritu, así que más que tocar fondo, creo que prefiero enfrentar las adversidades y no exagerar demasiado, es cosa de cambiar el cristal y simplemente ser.